En España los huevos no se compran refrigerados sino que se encuentran a temperatura ambiente en la tienda, a diferencia de otros países que si que los venden refrigerados. Esto se debe al modo en el que se procesan los huevos, por ejemplo en EEUU o Japón son lavados antes de venderlos en los supermercados por lo que la capa protectora que recubre el huevo desaparece obligando a que se vendan refrigerados. Sin embargo, en España y en otros países Europeos los huevos disponen de una barrera o membrana protectora en la cáscara, una sustancia viscosa que ayuda a proteger el interior permitiendo que se vendan sin refrigerar.
Si en España compramos los huevos a temperatura ambiente, ¿dónde y cómo los debemos de conservar? Esta es una duda muy habitual y es que los huevos son uno de los alimentos que producen más intoxicaciones ya que son muy vulnerables a la contaminación y crecimiento de bacterias. Para ello vamos a ver la forma correcta de conservarlos para evitar que se echen a perder y así evitar el riesgo a sufrir posibles intoxicaciones.
La cáscara es porosa, aunque no se vean dichos poros, por lo que es muy importante saber conservarlos para que las posibles bacterias no entren en contacto con el interior. Los huevos que no han sido conservados correctamente pueden favorecer futuras intoxicaciones como la Salmonela.
¿Dónde se conservan los huevos?
Los huevos deben de permanecer en la nevera a 4ºC una vez los hayamos comprado ya que es el único sitio donde no van a sufrir cambios de temperatura bruscos. El lugar idóneo para conservar los huevos dentro de la nevera es en una de las baldas y no en la puerta, esto se debe a que en este último sitio está expuesto a constantes cambios de temperatura. Seguro que alguna vez los has guardado en la típica huevera que hay en la puerta de la nevera, pero sabiendo esto seguro que evitarás guardarlos ahí para conservarlos mejor.
¿Cómo se conservan los huevos?
Además de conservar los huevos en una de las baldas de la nevera deben de conservarse en su envase y no hay que lavarlos antes de guardarlos. Eso sí, antes de colocarlos en la nevera fíjate por si hubiese alguno roto para retirarlo y evitar que se contamine el resto. Por otro lado, si hubiese alguno roto también debes de observar que los huevos de alrededor no estén manchados por el huevo roto, sino lo mejor sería tirarlos. Antes de cocinarlos puedes lavarlos y retirar los posibles restos de plumas que pueda haber, pero no podrás volverlos a refrigerar.
Ahora ya sabes dónde y cómo se conservan los huevos así que cuando los hayas comprado consérvalos correctamente para evitar que se echen a perder antes de tiempo y reducir el riesgo de sufrir posibles intoxicaciones. Lo mejor es comprar los huevos que vayas a comer en un periodo corto de tiempo y no comprar en exceso, también evitarás tirar comida a la basura por haberse caducado. Esto no solo se debe de hacer con los huevos sino con el resto de alimentos.