El tomate es uno de los alimentos que suele comerse con piel. De hecho en la mayoría de las recetas no es necesario retirarla. No obstante vamos a aprender a pelar paso a paso un tomate para preparar deliciosas recetas en las cuales si sea preciso retirar la piel. Si piensas que pelar tomates es tarea difícil o imposible recuerda que todo es posible, una vez aprendas a hacerlo cambiarás tu opinión. La clave está en escaldar los tomates.
¿Cómo pelar los tomates?
Para pelar los tomates vas a necesitar un cuchillo y un contraste de temperatura. No intentes pelarlos en frío porque te vas a llevar con la piel la mitad de la carne. Sigue los pasos que te explicamos a continuación para pelar los tomates de la forma más fácil y rápida.

1. Agua fría
El primer paso es disponer de un cuenco con agua fría. Para ello debes de guardar un cuenco o un recipiente lleno de agua en la nevera o congelador. Dependiendo de la cantidad de tomates que vayas a pelar vas a necesitar más o menos agua fría. Deja reposar hasta que el agua esté muy fría, el contraste debe de ser grande.
2. Agua hirviendo
En un cazo o cacerola vamos a hervir agua. Para ello agregamos bastante cantidad de agua y llevamos a ebullición. Los tomates no deben de meterse en la cacerola si el agua no está hirviendo.
3. Cortar ligeramente el tomate
Para que los tomate se puedan pelar bien hay que hacer una ligera incisión en la base de éstos. Cuanto más superficial sea mucho mejor. El corte debe de ser en cruz, de esta manera la piel se levantará con mayor facilidad.
4. Escaldar los tomates
Cuando el agua comience a hervir incorporamos los tomates, es decir, los escaldamos durante 20 segundos. Es importante no pasarse con el tiempo que están sumergidos en agua, teniendo un máximo de 30 segundos.
5. Contraste de temperatura
El contraste brusco de temperatura para pelar bien los tomates es necesario. Por eso hemos guardado agua en la nevera o en el congelador. Saca el cuenco o recipiente con agua fría y pasa los tomates de la cacerola a dicho cuenco durante 2-3 minutos. Si no te ha dado tiempo a que se enfríe el agua puedes incorporar hielos.
6. Pelar los tomates
En este paso vas a ver que en la base, donde hemos hecho el corte en cruz, la piel se ha levantado. Tira de la piel hasta retirarla por completo, se levanta prácticamente sola.
Con estos pasos has aprendido a pelar tomates de la forma más fácil y rápida. A partir de ahora podrás preparar las recetas que más te gusten con el tomate sin piel. No obstante, hay recetas en las que no hace falta como es el caso del gazpacho que las verduras se comen con piel. De hecho esta parte tiene un gran número de nutrientes y que al quitarla pierde parte de sus propiedades.


