Seguro que alguna vez te has preguntado el por qué se oxidan las manzanas tan rápidamente. A veces, al elaborar recetas, tan solo utilizamos media manzana, o la empezamos a preparar primero, y en el momento de utilizarla vemos que ha comenzado a ponerse marrón. Hoy vamos a ver el por qué se oxidan y cómo podemos evitarlo para no tener que tirarlas.
La manzana cuando se oxida pierde su sabor, además se vuelven de color marrón. Para aprovecharte de todas sus propiedades y beneficios debemos de evitar que se oxiden, ya que cuando esto ocurre, se pierde también gran parte de su valor nutricional.
Por eso, vamos a ver algunos pequeños trucos para evitar que las manzanas se oxiden y sigan teniendo ese aspecto tan apetecible. El mayor problema de que se oxiden las manzanas es la pérdida de su valor nutricional, además de tener un aspecto mucho menos atractivo.

¿Por qué se oxidan las manzanas?
La causa que desencadena la oxidación de las manzanas es el contacto con el oxígeno. Cuando empiezas a pelar una manzana, empieza a ponerse en contacto con el aire y comienza a oxidarse de forma muy rápida. Esto se debe a una reacción química entre las enzimas de la manzana y el oxígeno.
No importa si las manzanas son de temporada y se encuentran en su estado más óptimo, o si son frescas, todas se oxidan. Algunas manzanas tienden a oxidarse más rápido que otras, pero al final todas acaban haciéndolo. Para evitar o retrasar el proceso de oxidación vamos a ver los trucos que existen, y de esta manera no tener que tirar las manzanas.

Estos son los trucos para evitar que la manzana se oxide
¿Cuántas veces te ha pasado? Es muy habitual que nada más empezar a pelar una manzana comience a oxidarse, así que atento a estos pequeños trucos para cuando vayas a utilizar esta fruta para tus recetas.
1. Agua fría
Este es el truco más sencillo para retrasar la oxidación de las manzanas. Una vez peladas, las sumergimos en agua fría (sin que queden en la superficie), hasta que tengamos que utilizarlas en nuestras recetas.
2. Ácidos cítricos
El remedio más efectivo para evitar la oxidación de ciertas frutas, entre ellas la manzana, es utilizar el zumo o jugo de limón, de piña o de naranja, por ejemplo. Al utilizar estos jugos, que contienen ácidos cítricos, ayudan a retrasar el proceso de oxidación de la manzana. Pondremos las manzanas en un bowl (enteras o en rodajas) y las bañaremos con estos jugos. También puedes añadir un poco de agua para rebajar el ácido de los jugos.
3. Bolsas al vacío
Con este truco podrás retrasar el proceso de oxidación de las manzanas, pero debes hacerlo bien. Cuando utilizas las bolsitas al vacío no entra aire, por lo que las manzanas no se oxidarán. Este truco lo debes de hacer rápido para que las manzanas en contacto con el aire lo menos posible.
4. Papel film
Este truco es muy parecido al anterior, pero debes envolver bien las manzanas para que no entre nada de aire. Así que si no disponéis de bolsitas al vacío, podéis utilizar papel film.
5. Agua y sal
Para retrasar el proceso de oxidación, puedes mezclar agua con sal en un bowl e introducir las manzanas ya sean enteras o en rodajas. Cuando vayas a utilizarlas debes lavarlas para eliminar el sabor salado.
Recuerda que estos trucos sirven para retrasar o evitar de manera puntual el proceso de oxidación de las manzanas. Lo mejor va a ser siempre comerlas en el momento.


