El consumo de sal es necesaria para distintas funciones del organismo, entre ellas para regular el funcionamiento del sistema nervioso. Debe de existir un equilibrio en cuanto a macronutrientes y micronutrientes para llevar a cabo una dieta equilibrada. La sal tiene beneficios, pero un consumo excesivo también tendrá efectos secundarios, por lo que debemos de moderar su consumo y limitarnos a no sobrepasar la cantidad diaria recomendada.
La OMS recomienda un consumo diario de 5 gramos de sal en adultos, 4 gramos en niños de 7 a 10 años y 3 gramos en menores de 7 años. No es mucho, pero es la cantidad suficiente que necesita nuestro organismo para funcionar correctamente. No es necesario añadir sal en exceso a nuestras comidas ya que puede tener efectos secundarios tanto a corto plazo como a largo plazo, además también podemos estropear nuestras comidas.
Lo importante es mantener una buena salud, y esto se consigue llevando a cabo una dieta equilibrada y realizando ejercicio regularmente. Evitando los excesos, y no solo de la sal sino en general con cualquier otro tipo de alimentos, ayudaremos a nuestro organismo a funcionar correctamente y evitar o reducir el riego a desarrollar enfermedades.
Beneficios de la sal
La sal siempre y cuando se consuma de forma moderada nos va a aportar una serie de beneficios.
- Un consumo moderado de sal nos ayudará a mantenernos hidratados. Además, una de sus funciones es mantener un equilibrio electrolítico de los líquidos presentes en el organismo.
- Aumenta la presión arterial, pero este es un beneficio para las personas que no tengan hipertersión.
- Ayuda a regular el apetito y nuestro sistema digestivo.
- La sal ayuda a prevenir infartos cerebrales, ya que se encarga de regular los impulsos nerviosos así como ayudar a la relajación muscular.
No son muchos sus beneficios, pero la sal es necesaria para nuestro organismo. Sin sal no podríamos vivir, pero debemos de limitar su consumo a 5 gramos máximos al día. Para reducir el consumo de sal podemos evitar comer fuera, o si lo hacemos podemos decir que añadan menos sal, también debemos de evitar el consumo de alimentos ultraprocesados o alimentos que ya contengan sal o tengan un alto contenido de ésta. Si nosotros medimos la sal, llevaremos un control de la cantidad que tomamos al día.
Por todas las funciones que tiene la sal en nuestro organismo no debemos dejar de tomarla a no ser que te lo haya pautado tu médico. Lo que si que se puede hacer para evitar el consumo excesivo de sal es hacer una dieta baja en sodio y evitar añadir sal de más a nuestras comidas.