El aguacate es un fruto exótico, y carnoso, que se obtiene de un árbol tropical que se llama también así: aguacate. Este fruto suele medir entre 5 y 6 centímetros, aproximadamente, y su peso suele rondar los 200 a 400 gramos, aunque se pueden encontrar piezas que llegan incluso hasta los 2 kg de peso como máximo. El tono del aguacate puede depender de la variedad, aunque será siempre de color verde y, además, con una corteza gruesa y dura.
El aguacate es un fruto realmente apreciado en la gastronomía no solo por su sabor, sino también porque es un fruto realmente versátil para cocinar y con unas características nutricionales muy particulares. Su sabor hace que se pueda utilizar en multitud de platos, su textura también abre un importante abanico de recetas posibles y su composición hace que sea un buen aporte de grasa saludable.
Qué es el aguacate
Este fruto exótico carnoso tiene una pulpa aceitosa de color crema o verde amarillento con un sabor similar a la nuez. En la parte central hay una única semilla redondeada, de color pardo claro y de grandes dimensiones. La polinización del aguacate la hacen las abejas y algunos otros insectos de tamaño parecido. Entre las características clave del aguacate está su importante aporte de ácido oleico, con beneficios cardiovasculares y con la disminución de los niveles de colesterol plasmático. Pero además, el aguacate es un fruto que nos garantiza un buen aporte tanto de minerales como de vitaminas.
El aguacate es un fruto con un elevado porcentaje de grasa y un gran aporte energético. Tan solo 100 gramos de aguacate aportan hasta 240 kcal, así como una gran cantidad de minerales como potasio, hierro y fosforo. Al mismo tiempo es una fruta baja en hidratos de carbono. Y aunque tenga mucha grasa, es una grasa saludable de origen vegetal, sin colesterol e insaturada.
Cómo se come el aguacate
Hay muchas formas de consumir el aguacate. Se puede comer crudo o cocido, y es más habitual que se utilice como hortaliza que como fruta. Hay disponibles aguacates a lo largo de todo el año, y en contra de lo que se suele pensar su color exterior no nos indica el grado de madurez del fruto. Lo que sí podemos saber por el color de su piel es, sin embargo, cuál es la variedad del aguacate.
El momento óptimo en el que consumir el aguacate está determinado por la dureza de la pulpa. Lo ideal es esperar hasta que se pueda untar como si fuera mantequilla. Por eso, si no estuviera totalmente maduro es tan sencillo como dejarlo 2 ó 3 días madurando a temperatura ambiente. Y si se quiere conservar, y detener esta maduración, también será tan fácil como meterlo en la nevera. Con cuidado, eso sí, porque es un fruto que no tolera correctamente las temperaturas muy reducidas.